ARTICULOS DE PSIQUIATRIA

EL ALCOHOLISMO: “UN TRAGO QUE TRAE CONSIGO VARIOS ESTRAGOS A LO LARGO DE LA VIDA DE UN ALCOHOLICO (A)”


AUTOR
PSICOLOGA. PAOLA HERNADEZ CENTENO

DR. ANGEL MAURICIO SORIANO PEREZ

RESUMEN
El propósito elemental de este ensayo es mostrar todas las repercusiones que hay cuando hay un miembro alcohólico en la familia. Una familia con un miembro alcohólico sufre muchas modificaciones en su dinámica familiar, modificaciones que alteran de manera directa o indirectamente a todos los miembros de la familia.
Hay una serie de factores que pueden desencadenar que la persona se vuelva alcohólica, pero estos factores los predisponen las mismas familiar
Una de las conclusiones a las que lléganos es que los más afectados en la dinámica de una familia con un miembro alcohólicos son los hijos y más cuando estos son muy pequeños. También se pudo concluir que cuando una madre es alcohólica se rompe más con el equilibrio de una familia, ya que ella en la mayoría de los casos es quien lleva las riendas de la familia

INTRODUCCION
Para comenzar quisiera explicar un poco acerca de lo que es la dependencia al alcohol
Es una enfermedad caracterizada por el consumo incontrolado de bebidas alcohólicas a un nivel que interfiere con la salud física o mental del individuo y con las responsabilidades sociales, familiares u ocupacionales.
El alcoholismo es un tipo de farmacodependencia, en la cual existe tanto la adicción física como la psicológica. La dependencia física se manifiesta en la reaparición de los síntomas cuando el consumo de alcohol se interrumpe, la tolerancia a los efectos causados por el alcohol y la evidencia de enfermedades asociadas con el alcohol.
El alcohol afecta al sistema nervioso central y actúa como un depresor que desencadena una disminución de la actividad, ansiedad, tensión e inhibiciones. Inclusive unos pocos tragos de alcohol producen cambios en la conducta, lentitud en el desempeño motriz y una disminución de la capacidad de pensar con claridad; la concentración y el juicio del individuo se deterioran y si se consume en cantidades excesivas, se puede producir intoxicación.
El alcohol también afecta otros sistemas del cuerpo y provoca irritación del tracto gastrointestinal y erosión del revestimiento del esófago y el estómago, causando náuseas y vómitos, y posiblemente sangrado. Las vitaminas no se absorben de manera apropiada, lo cual puede conllevar a deficiencias nutricionales debido a un consumo prolongado de alcohol. Así mismo, se puede sufrir enfermedad hepática denominada hepatitis alcohólica, que puede progresar a cirrosis.
El alcohol afecta al sistema nervioso y puede producir deterioro nervioso y pérdida severa de la memoria. El consumo crónico de alcohol también puede aumentar el riesgo de cáncer de la laringe, esófago, hígado y colon.
Las consecuencias sociales del problema de beber y la dependencia del alcohol pueden ser tan serias como los problemas médicos. Las personas que abusan o son dependientes del alcohol tienen una tasa más alta de desempleo, violencia doméstica y problemas con la ley. Aproximadamente la mitad de las muertes en accidentes de tránsito están asociadas con el consumo de alcohol.
El desarrollo de la dependencia del alcohol puede surgir en un período de años, seguido de un patrón progresivo relativamente constante. Al inicio, el individuo experimenta una fase de tolerancia al alcohol, lo cual resulta en la capacidad de consumir una gran cantidad antes que sus efectos adversos se noten. La fase siguiente a la tolerancia se caracteriza por un deterioro de la memoria (lagunas) relacionada con los episodios del consumo y posteriormente se presenta una falta de control durante el consumo, en la cual el individuo afectado ya no puede suspender el alcohol en el momento en que lo desee. El comportamiento más grave se presenta durante fiestas prolongadas con consumo de alcohol, en las cuales hay complicaciones mentales o físicas asociadas. Algunos individuos son capaces de ganar control sobre su dependencia en las fases iniciales, antes de que se presente una pérdida total del control. El problema es que nadie sabe cuáles bebedores compulsivos podrán recuperar el control y cuáles no.
La abstinencia se desarrolla debido a que el cerebro se ha adaptado físicamente a la presencia del alcohol y no puede funcionar adecuadamente en ausencia de la droga. Los síntomas de la abstinencia pueden incluir aumento de la temperatura, aumento de la tensión arterial, frecuencia cardíaca rápida, inquietud, ansiedad, psicosis, convulsiones y, en raras ocasiones, incluso la muerte.
No existe una causa común conocida del alcoholismo. Sin embargo, varios factores pueden jugar un papel importante en su desarrollo. Una persona con una madre o con un padre alcohólico tiene más probabilidades de volverse alcohólica que una persona sin historia de alcoholismo en la familia inmediata. La investigación sugiere que ciertos genes pueden aumentar el riesgo de alcoholismo, pero qué genes o cómo ejercen su influencia es motivo de controversia. Entre los factores psicológicos están la necesidad de aliviar la ansiedad, una depresión en curso, conflictos de relaciones interpersonales sin resolver o baja autoestima; y entre los factores sociales están la disponibilidad del alcohol, la aceptación social del consumo de alcohol, la presión del compañero y estilos de vida estresantes.
El presente trabajo tiene la finalidad de abordar de manera específica como el alcoholismo afecta la vida de una familia y no solo en la dinámica si no también como afecta en la vida marital de la pareja.
Comúnmente siempre se dice que el alcohólico en una familia es el hombre, pero nunca se toma en cuenta que también lo podría ser una mujer, estamos acostumbrados a ver al alcohólico como una figura masculina, lo que hace que muchas las mujeres alcohólicas pasen desapercibidas.
Cuando una mujer es alcohólica, la dinámica de la familia cambia mas que si fuera un hombre ya que la mujer tiene mas responsabilidades en la casa y por ende con todos los miembros de la familia, mas adelante explicaremos todos los cambios que sufre la dinámica familiar cuando la madre es alcohólica, y no solo hablamos de cambios de roles o de funciones si no también cambios en la relación marital.
El tener una madre alcohólica puede ser muy difícil para una familia, sobre todo porque muchas veces es la mujer quien lleva el sostén de la casa, sobre todo en al ámbito afectivo, y además quienes sufren mas por esto son los hijos, quienes tienen que sobrellevar la enfermedad de su madre ó de su padre.
Otro aspecto que también seria conveniente mencionar es el hecho de que en muchas ocasiones el alcohol destruye la relación pareja, en el sentido que se rompe con toda comunicación afectiva y sexual, pero todo esto se explicara de manera más amplia más adelante
También es importante mencionar que cuando una mujer es alcohólica tiene mas posibilidades de padecer una depresión o llegar hasta el suicidio lo que afecta de manera muy grave el entorno familiar.
Nuestro trabajo tiene como objetivo hacer una análisis de cómo la familia trata de "sobrevivir" ante la crisis de la enfermedad de uno de sus miembros y cómo es que los roles cambian en la dinámica de la familia, el papel de la relación marital y la forma en que el alcoholismo afecta a los hijos.

DESARROLLO
El alcoholismo hoy en día es un problema de salud pública que afecta al individuo en su vida personal, familiar y social; siendo está una enfermedad crónica, progresiva y mortal que deteriora el funcionamiento físico y psicológico del Individuo. Cabe mencionar que el alcoholismo no es privativo de un determinado sector de la población ya que afecta a hombres y mujeres sin importar las clases sociales, las religiones ó grupos étnicos.
El alcoholismo trae consigo fuertes repercusiones en la psicodinámica familiar afectando de está forma el adecuado funcionamiento de la misma. La familia con un miembro alcohólico es un sistema que se caracteriza por la disfuncionalidad de su dinámica ya que existe una gama multifactorial que interviene en el mal funcionamiento de la misma.
Entre los factores más importantes que impiden el buen funcionamiento están los siguientes:
-Falta de límites. Generalmente en las familias con miembros alcohólicos no existen límites establecidos, “ En cuanto a los límites me refiero no solo a los límites que los padres alcohólicos puedan ponerles a sus hijos, sino a los límites acatados por todos los miembros de la familia incluyendo a la ó las personas alcohólicas “. En este tipo de familias los límites no se “conocen” ¿cómo habría de poner un padre ó una madre alcohólica limites a sus hijos si ni ella ó él los llevan a cabo?
-Comunicación cerrada y escasa. La pregunta en cuestión ¿cómo es la comunicación dentro de la familia que tiene a uno ó varios miembros alcohólicos? Como es más que evidente la comunicación es nula, carente de significado e importancia. Los padres alcohólicos por lo general no se interesan en las necesidades de sus hijos ó familiares más cercanos puesto que su interés primordial es principalmente beber. Otro de los aspectos por los cuales la comunicación es carente se debe a que la mayoría de los alcohólicos suelen responder de forma agresiva lo que limita el interés por parte de los hijos a hablar con ellos.
-Carencia de sentimientos positivos y predominio de los negativos. La afectividad en este tipo de familias “no existe”, a los hijos no se les enseña el significado del amor, del cariño y crecen sin demostrarlo pues solo perciben mensajes distorsionados por parte de su familia. Por su parte los padres alcohólicos ó bien se pueden mostrar indiferentes ó pueden demostrar sus sentimientos en forma de violencia física ó verbal.
Ahora bien, ¿es más frecuente que dentro de la familia el padre sea el “alcohólico”? ¿en que forma afecta a los hijos que la madre sea la alcohólica? ¿qué sentimientos experimentan los hijos de padres alcohólicos? ¿existe una diferencia significativa en cuánto a la satisfacción marital de mujeres alcohólicas y mujeres no alcohólicas?. Anteriormente se podía decir que el porcentaje de población alcohólica era más alto en varones que en mujeres, sin embargo hoy en día las estadísticas demuestran que la cifra de mujeres alcohólicas está alcanzado la cifra calculada en los hombres; por lo que resulta algo complicado decir en la actualidad que es más frecuente “tener un padre ó una madre alcohólica”. Aunque en muchas de las ocasiones es más fácil detectar que el padre es el alcohólico ya que la mujer alcohólica muchas de las ocasiones bebe sola, lo que complica la detección de su enfermedad. Además de que no hay que olvidar el mecanismo de “negación” de la enfermedad que en tanto hombres como mujeres se presenta.
Para la mujer “el ser alcohólica” se complica aún más, porque ser alcohólica según el criterio común es ser “una mujer pérdida”, “mujer sin virtudes y sin moral”, “mujer vil”; situación está en que si el ser alcohólico es grave, en la mujer toma dimensiones realmente insospechadas. No obstante existe algo que la mujer puede generalmente hacer, y la mayoría lo hace. Puede beber en privado, puede enterrarse y presentarse ante el mundo como un cuadro de terribles jaquecas, que prácticamente equivalen a una invalidez crónica; y de paso aprende muchísimo a ocultar sus verdaderos pensamientos; en otras palabras aprende a pensar con deshonestidad. Agregados a sus propios esfuerzos para ocultar su alcoholismo, están los bien encausados intentos de su familia para disimular su vergüenza (la vergüenza de ellos) ante el resto del mundo.
Por otra parte es importante mencionar que cuando la madre es la alcohólica dentro del núcleo familiar esto trae repercusiones negativas más significativas en el desarrollo de los hijos ya que generalmente cuando el padre es el alcohólico existe cierta protección, afecto y comprensión materna; caso contrario ocurre cuando la situación es al revés ya que como es común aún cuando ninguno de los dos cónyuges sea alcohólico la mayor parte de expresión de afecto hacia los hijos proviene de la madre por lo que en el caso de que la madre sea la alcohólica los hijos se sentirían más desamparados y desorientados.
Sin duda alguna los hijos son las personas más afectadas cuando alguno ó los dos padres son alcohólicos. Los hijos de padres alcohólicos generalmente llegan a expresar una ambivalencia que va desde el odio al amor. Odio hacia el objeto amoroso que no los escucha, no los comprende, no les presta ni el mínimo de interés, los maltrata verbal y en ocasiones físicamente. Por el otro lado existe amor hacia el objeto amorosos “porque la persona alcohólica es su padre ó su madre” y el individuo al sentir odio se siente el hijo más malo del mundo experimentando de está forma sentimientos de culpabilidad.
Esta ambivalencia es una de los principales conflictos con el que tienen que vivir día a día los hijos de los alcohólicos hasta que algunos en ocasiones terminan abandonando el hogar y en el peor de los casos llegando al suicidio.
En cuanto a la vida marital en el aspecto de satisfacción personal que experimentan las mujeres alcohólicas y las no alcohólicas de acuerdo a algunas investigaciones se demostró que si bien las mujeres alcohólicas presentaban debido a su consumo excesivo de alcohol: depresiones, abandono de los hijos, violencia física hacia sus hijos, promiscuidad, pérdida de empleo, irresponsabilidad moral e incluso suicidios; en la cuestión de la satisfacción sexual no presentaban diferencias.
-La Codependecia es otra de las razones por las cuales muchas de las ocasiones el alcohólico (a) no acepta y hace frente a su problemática debido a que la familia comienza a ejercer roles que en lugar de beneficiar perjudican su condición.
Es de notarse que en la progresión del proceso del alcoholismo, la bebida y los problemas aumentan y empeoran. La vida familiar se deteriora más y más en términos físicos, emocionales, sociales, vocacionales y espirituales. La conducta del miembro de la familia que sufre alcoholismo, aunque incomprensible e hiriente, es también un proceso de reacciones y defensas humanas y naturales en el dilema. Unidos a estas condiciones los cambios en el comportamiento de la familia van en aumento y en ocasiones al igual que el alcohólico (a) tratan de negar la existencia del problema.
El proceso de rehabilitación de un alcohólico (a) que ha determinado dejar de beber es, ciertamente, un proceso que implica autodisciplina, tolerancia, paciencia y consistencia para llegar a la meta. La abstinencia es solo el primer paso de quien ha decidido dejar el alcohol; pero la verdadera meta es la “sobriedad”.
Las siguientes preguntas las utiliza el Nacional Institute on Alcohol Abuse and Alcoholism (Instituto Nacional de Abuso de Alcohol y Alcoholismo) para evaluar el abuso/dependencia del alcohol:
• ¿Ha sentido que debe dejar de beber?
• ¿Alguna vez maneja cuando ha estado bebiendo?
• ¿Existe alguien en su familia preocupado por su forma de beber?
• ¿Ha tenido alguna vez lagunas después de beber?
• ¿Se ha ausentado alguna vez del trabajo o perdió un trabajo por la bebida?
• ¿Tiene que beber más que antes para lograr la embriaguez o el efecto deseado?
CONCLUSIÓN
Muchas personas con problemas de alcohol no reconocen cuando la bebida se les sale de las manos. Anteriormente, los médicos tratantes creían que los alcohólicos debían ser confrontados acerca de su negación de los problemas con la bebida, pero ahora la investigación ha demostrado que la asesoría compasiva y comprensiva es más efectiva.
Una vez que el problema ha sido reconocido, se requiere la abstinencia total para aquellos que son dependientes; mientras que para aquellos que son bebedores problema la moderación puede servir. Puesto que muchos alcohólicos se rehúsan inicialmente a creer que su manera de beber está fuera de control, un ensayo de moderación a menudo puede ser una forma efectiva de tratar el problema; si éste tiene éxito, el problema está resuelto; de lo contrario, la persona por lo general está lista para ensayar con la abstinencia.









BIBLIOGRAFIA

Alazraki Yossifoff, Claudia. “LA DINAMICA FAMILIAR EN FAMILIAS CON UN MIEMBRO ALCOHOLICO.”. INSTITUTO MEXICANO DE LA PAREJA. http://www.ametep.com.mx/



Penichet Maria Cristina (2002), “Influencia del alcoholismo de la mujer en su satisfacción marital sexual”. INSTITUTO MEXICANO DE LA PAREJA. http://www.ametep.com.mx/


Martínez AM. Aspectos sociales y culturales del alcoholismo femeni. [Tesis de Grado Titulo de Maestría en Psiquiatría Social]. Ciudad de La Habana, Cuba; 1997.


Aizpún, G. (2006). Los Roles de la Familia del Adicto. Fundación de Investigaciones Sociales A.C. Alcohol-Infórmate. (On line) Disponible en: http://www.alcoholinformate.org.mx/familia.cfm?articulo=f94 (Marzo, 27, 2006).

Noble J. Textbook of Primary Care Medicine. 3rd ed. St. Louis, Mo: Mosby; 2001:428-439.